El reloj marca las 16.37 h. Ha sido una siesta de domingo un poco larga. Me he despertado en el sofá con la lluvia cayendo en la ciudad. No enciendo la música. Quiero escuchar el agua golpeando la ventana.
Preparo leche caliente y café. Un cuenco, un vaso de agua y dos tazas.... (Aunque ahora que lo pienso el vaso de agua no es necesario)
El cuenco de leche templada para Croqueta. Se lo dejo a los pies del sillón en el que dormita. Está enroscado sobre sí mismo con la cara tapada por la patas delanteras y dos bigotes asomando entre todo el pelo negro. Suspira profundo y gruñe un poco, parece que está soñando.
Agua de lluvia para la petunia que Doña Angustias me regaló el otro día. Decía que mi balcón estaba muy triste.
Agua de lluvia para la petunia que Doña Angustias me regaló el otro día. Decía que mi balcón estaba muy triste.
Una de las tazas con leché y cola-cao para el bogeyman. Se la llevo a la habitación. Está sentado en el borde de una estantería del armario, con la puerta entreabierta para oir el agua. Hoy no nos decimos nada. Coge la taza, me sonríe y sigue mirando por la ventana. Parece que tiene ganas de estar solo con sus recuerdos sobre alguien que ambos sabemos.
Y la otra taza de café para mí en pijama, coleta y con ganas de pensar.
Me siento en una silla al lado de la ventana del salón. El barrio está vacío. Lleva todo el día lloviendo. Las cortinas de los pisos esconden la luz de la televisión, de las lámparas y de los ordenadores excepto unas: Las cortinas de la ventana de enfrente dejan entrever las piernas entrelazadas de una pareja.
Aún sigo algo enfadada con Ojos tristes. Hace quince días que me crucé con ella en el metro y no me reconoció. El encuentro me ha hecho plantearme que habría sucedido sino me hubiera ido. ¿Habría terminado escondida en un rincón de su mente, haciéndole compañía al bogeyman? No lo sé... No me arrepiento de haberme ido. Me he convertido en un ego transmutado y eso implica dejarla atrás. Pero ¿debería echarla de menos? ¿Otros como yo echan de menos a su persona origen?
Aún sigo algo enfadada con Ojos tristes. Hace quince días que me crucé con ella en el metro y no me reconoció. El encuentro me ha hecho plantearme que habría sucedido sino me hubiera ido. ¿Habría terminado escondida en un rincón de su mente, haciéndole compañía al bogeyman? No lo sé... No me arrepiento de haberme ido. Me he convertido en un ego transmutado y eso implica dejarla atrás. Pero ¿debería echarla de menos? ¿Otros como yo echan de menos a su persona origen?
Pienso en Ojos tristes; en qué estará haciendo. Pego la nariz contra el cristal de la ventana, haciendo vaho y figuritas con el dedo. Pienso en todas las cosas que quería hacer Ojos tristes, todas las fantasías que tenía. Sigo haciendo figuritas y entonces recuerdo un sueño en particular.
Salgo corriendo y regreso al comedor con un bloc de dibujo y unos lápices. Esbozo la calle vacía, mojada; la lluvia cayendo... De repente se me cuela una chica en el escenario. Camina descalza por medio de la calle. Está empapada y sonriente. Cuando pasa bajo mi ventana mira hacia arriba, me ve y saluda con la mano. Le respondo agitando el lápiz. Ella sigue su camino. Abro la ventana y desde el balcón se puede escuchar como tararea Moon river bajo la lluvia mientras se aleja. Para cuando la pierdo de vista ya estoy empapada.
Vuelvo dentro y sigo a lo mío. Me imagino a la persona origen de esa chica y la dibujo en el bloc. Una mujer envuelta en mil capas de ropa, con un enorme paraguas amarillo y su cara escondida entre el pelo.
Bata
Salgo corriendo y regreso al comedor con un bloc de dibujo y unos lápices. Esbozo la calle vacía, mojada; la lluvia cayendo... De repente se me cuela una chica en el escenario. Camina descalza por medio de la calle. Está empapada y sonriente. Cuando pasa bajo mi ventana mira hacia arriba, me ve y saluda con la mano. Le respondo agitando el lápiz. Ella sigue su camino. Abro la ventana y desde el balcón se puede escuchar como tararea Moon river bajo la lluvia mientras se aleja. Para cuando la pierdo de vista ya estoy empapada.
Vuelvo dentro y sigo a lo mío. Me imagino a la persona origen de esa chica y la dibujo en el bloc. Una mujer envuelta en mil capas de ropa, con un enorme paraguas amarillo y su cara escondida entre el pelo.
Bata